Con el nombre de “frenos de potencia” fue resaltado en su oportunidad la aparición de componentes reforzadores del sistema de frenos automotor. Estos elementos aun se encuentran presentes en los vehículos actuales y cumplen con la finalidad de reducir el esfuerzo del conductor sobre el pedal, disminuyendo a su vez el recorrido del mismo. Aunque se trata de un invento bastante viejo, los Frenos de Potencia hicieron su aparición comercial de forma masiva cerca de 3 décadas atrás. En su momento fue anunciado como una marcada ventaja competitiva, también se suponían sobredimensionados, ya que era común en esa época “trabar” las ruedas con relativo poco esfuerzo sobre el pedal de frenos; este efecto generaba una sensación de alta eficiencia de frenado, motivada quizás por el característico ruido de las ruedas deslizando sobre el pavimento.
Hoy en día, los sistemas de potencia han sido perfeccionados de tal manera que logran una eficiencia real del tiempo y distancia de frenado, aun con menor o limitado deslizamiento de las ruedas. Los sistemas de potencia son aún mucho más efectivos cuando son asistidos por sistemas electrónico-hidráulicos de antibloqueamiento de ruedas conocidos también como “frenos ABS”.
El más común de estos reforzadores es el Servofreno, ubicado entre la varilla del pedal (lápiz de la bomba) y el cilindro principal de frenos (bomba de frenos); el mismo se caracteriza por tener uno o más diafragmas de goma que funcionan aprovechando el vacío producido por el motor. Su forma externa se debe a que funciona como un envase contenedor de una cantidad limitada de vacío, lo cual permite dos o tres frenadas efectivas aún con el motor apagado. Si se consume este remanente de vacío se anulará la asistencia al esfuerzo de frenado y se requerirá presionar el pedal con mucha más fuerza para lograr efectividad. Es contraindicado apagar el vehículo cuando se encuentra aún en movimiento ya que genera una condición de alto riesgo, esta condición es agravada si el vehículo es de transmisión automática o se encuentra en una subida o bajada.
También existen los reforzadores de tipo hidráulico, especialmente en vehículos equipados con motor Diesel, posee la misma ubicación física que el Servofreno pero en vez de utilizar el vacío del motor aprovecha el fluido hidráulico y la bomba de la dirección asistida (dirección hidráulica) para reducir el esfuerzo sobre el pedal. También suele ser utilizado en vehículos deportivos ya que requiere menor espacio del compartimiento del motor por no utilizar envase acumulador de vacío.
Algunos vehículos diesel utilizan reforzadores por vacío, sin embargo, para ello requieren de una bomba de vacío conectada al árbol de levas o a la correa de impulsión de accesorios, esto se debe a que los motores Diesel producen valores muy pobres de vacío en el sistema de admisión de aire del motor, algunas veces es incluso inexistente o con presión positiva si es de tipo sobrealimentado como el caso de las versiones equipadas con turbo. Existen múltiples variables de estos 2 tipos principales de reforzadores de frenado, cada sistema utiliza diferentes nombres comerciales.
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